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Terapia no invasiva y completamente indolora, adaptada a las complejidades del desarrollo de la patología, de intervención aplicable justo después del trauma o en las pre y/o postoperatorio.

Permite al fisioterapeuta intervenir en la piel dañada, y en casos con inmovilización prolongada, directamente sobre vendajes, aparatos ortopédicos, yesos o escayolas, sin contacto directo con la piel.

Efectos sobre el organismo:

• Acelerar el proceso de curación
• Normaliza y regenera el tejido lesionado.
• Mejora el tejido muscular.
• Repara el tejido nervioso.
• Elimina el dolor.
• Mejora el flujo y aporte hemático.
• Fortalece los tejidos vasculares.
• Resolución del edema.

Técnica capaz de implantar medicamentos sin utilizar agujas o corriente eléctrica, con una gran ventaja para pacientes en términos de comodidad, con posibilidad de repetir la aplicación de medicamentos cuantas veces sea necesaria, según la prescripción del médico tratante.

Entre las principales mejoras que obtienen los pacientes que son tratados con la bomba diamagnética son:

• Activación de los procesos de reparación celular, de tejidos anti-edema.
• Tiempo de recuperación es menor.
• Alcance de las patologías a tratar consigue una profundidad de hasta 7cm, otorgando una mayor eficacia en el tratamiento de paciente.

Los campos de aplicación de la diamagnetoterapia son:

• Ortopedia y traumatología.
• Reumatología.
• Fisiatría.
• Medicina del deporte.
• Flebología.
• Terapia del dolor.